Quiero viajar entre tus manos, tus ojos y también en tu cuerpo.
Tus manos me dan el amor, me llevan a ciudades de amor.
Y tus ojos, son tus ojos, tan solo tus ojos, tus ojos me lo dan todo
y mi corazón vuela, se estremece, se tira a escribir.
Mis manos lo hacen con la inteligencia de un torpe
y solo en tus manos se hacen nuestras historias.
No puedo evitarlo, tus manos me convencen
ese corazón es mío, solo mío. No lo digo yo, lo dicen tus manos.
Tus manos me convencen de esto y aquello y mi corazón
quiere volar entre cielos y ciudades
y esto y aquello y lo otro retuercen la razón
y solo mi corazón me dice cuanta falta me haces.
Mi corazón viaja, se estremece y se pierde en tu ausencia
escribir, escribir, escribir para construir
con palabras tú inminente retorno,
inventar el mejor regreso, tú lo harás real. Mi corazón lo dice.
Amo tus ojos. Esos que me ven cuando
hablas. Esos que siento cuando te escucho.
Esos ojos, tus ojos amor, que me ven, que siento.
Los amo, los extraño, los deseo.
Y escribo de nuestros ayeres
de lo que persiste
y del imaginario calor de tus besos
y todo lo que humedece.
Oculta estas en un bosque de palabras
disfrazada de múltiples formas,
mis ojos no te ven,
mis oídos no te escuchan, mis manos no te tocan
pero mi corazón te sabe, te presiente
y persigue incansablemente ese presentimiento.
Mantente así, cerca y lejos, pero no dejes de seguirme
sígueme a donde vaya a donde quiera que este
no dejes de hacerlo
sin el presentimiento
de tu sombra no se a donde ir
y sin tus manos, tus ojos y tu cuerpo es morir.
En cada partícula tuya esta mi deseo
es víctima de tu sed
cada instante, cada momento
es tuyo, son tuyos, mis manos, mi cuerpo.
Y no hay olvido, ni dolor
solo angustia que alumbra el miedo
a encontrarte y no encontrarte.
Y nos amamos y nos entregamos…
FRAGMENTO II
Nos encontramos
y nos damos uno al otro
como dos desconocidos asustados
nos amamos y yo te pertenezco,
sin afán y sin medida
tan solo con nuestros cuerpos
hechos de uno para el otro, nos pertenecemos
sin razón y sin salida
como olas de mar
vas y vienes,
te entregas
a mi deseo a la par
como campanas
al aire, te columpias
en mis hombros,
te sostienes,
me amas,
lo sé, y yo te amo,
lo sabes, es decir
nos amamos, nos entregamos,
y escribo de esto y aquello,
pues escribir me sujeta a tu cuerpo
y cuelgo contento de él,
sin ganas de irme.
En el viaje de tu cuerpo mi corazón
comprende cuanto te ama.
Y aunque tengo el aroma de tu cuerpo en mi piel, urgen
tus manos, tus besos, tus ojos y tu humedad me atrapa,
tus manos me atrapan, avivan las ganas
y tus ojos recitan la poesía y el deseo
y escribo para meterme a tu cuerpo y escribo
sin ataduras, sin concesiones.
Todo lo que escribo es tuyo
tan tuyo como mi corazón lo es.
tan tuyo como mi corazón lo es.
Lo dicen mis manos
en cada letra que transcribo
en cada letra que transcribo
de mi alma a mis manos.
Me debo a tus ojos, a tus manos,
a tus besos, a las lunas
que en tu cuerpo reposan.
Mi corazón encendido alumbra tu sombra
y la hace propia
y en mis manos tus manos duermen.
Y nuestras historias se hacen
Y me salvan, me rescatan
de la pantanosa soledad
haciéndola un vínculo
perfecto para dos.
Nuestras manos se atan
y tu cuerpo se mese,
tus caderas bailan
y mi piel se estremece.
Y mi lengua resbala
en tu figura
de árbol
abierto.
Soy roca de tu mar,
tus olas me mojan
de la sal
de tu cuerpo.
Tu piel de espuma
buscan mis manos
y mis manos
tus adentros.
De tus adentros
vienes y vengo.
En tus adentros
me mantengo,
tus ojos se abren
y el mundo se enciende,
tus manos se abren
y el mundo se expande,
tu cuerpo se lía
y el tiempo se para
todo culmina
y el viaje termina.
Wow!!! Y mientras leía... como lo extrañé!!!...
ResponderEliminarWow!!! Y mientras leía... como lo extrañé!!!...
ResponderEliminarEs simplemente hermoso. ¡Cuanta inspiración! Y que bien escribes en serio. Me encanto eso de "Todo lo que escribo es tuyo..."
ResponderEliminarCuídate! Espero que estés bien.
Gracias mujer!
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